“Toda esta privatización nos está dejando por fuera y no nos da posibilidades de camino, a muchos senderos hemos llegado y nos encontramos con que han puesto obstaculos, alambre de púas y peajes, cobran por solo cruzar por allí, ya no puedes volver a pasar por ahí”, afirmó Néstor Ocampo, Líder de la Fundación Ecológica Cosmos y organizador de estas caminatas.
En 30 años han sido más de 10 mil personas entre habitantes del departamento, nacionales y extranjeros los que han participado de las 350 salidas. Son precisamente ellos los que más lamentan el fin de esta sana actividad.
“Esta situación no solamente debe indignar a quienes hemos venido participando del programa de caminatas sino a toda la sociedad, porque esto es una vulneración a los derechos humanos en el Quindío”, manifestó Johan Felipe López Castillo, participante de las caminatas.
Para Néstor Ocampo, una situación lamentable que le genera sentimientos encontrados entre nostalgia e indignación por empresas que han venido y están comprando hectáreas para sembrar aguacate hass y en otros casos para desarrollar proyectos turísticos, y para ello han bloqueado caminos.
El líder ambientalista concluyó que su decisión va cargada de algo de protesta por lo que llama pérdida del territorio y del derecho a disfrutarlo, en una realidad que afirma no es exclusiva del departamento sino que ocurre en varias regiones del país.